Se enfadará a no ser que le expliques un dato esencial: el servicio que prestan Uber y Lyft -la competencia de la primera en USA- lo ejercen coches privados y conductores sin licencia.
En España, ese modelo sólo duró unos días porque la justicia lo declaró ilegal. Se llamó UberPOP.
El caso es que Uber y Lyft suman 5 millones de traslados más que los taxis amarillos (los oficiales) en la ciudad de Nueva York.
La diferencia entre el modelo español y el americano es la razón de que el número de conductores de Uber que tiene Nueva York multiplica por cuatro al número de taxis amarillos. En España hay una licencia VTC por cada 10 taxis. O sea que el fenómeno que ocurre en Nueva York no se puede dar ni en Madrid ni en Barcelona.
¿Es bueno eso para el taxi en España? ¿Y para el consumidor?
Los datos de la Comisión de Transporte Urbano de Nueva York hacen pensar:
- Por una parte, los consumidores están apostando de forma masiva por las apps privadas. En sólo cuatro años, han pasado de 0 a 15 millones de traslados al mes. Uber ya es más grande en NYC que los taxis amarillos y los color manzana. De largo.
- Pero lo llamativo del caso es que Uber y Lyft han conseguido que el mercado se expanda en un 70 por ciento. Antes de que existieran estas apps, los neoyorquinos hacían 15 millones de viajes al mes. Ahora hacen 25 millones. La innovación disruptiva en este caso ha logrado que la tarta sea mucho más grande.
¿Por qué ha crecido el mercado? La hipótesis más verosímil es que el servicio que presta Uber en los barrios exteriores de NY (Brooklyn, Queens, Staten Island y el Bronx) es mucho mejor que el de los taxis amarillos.
Puede comprobarse en este otro gráfico:
Otra hipótesis que está ganando fuerza entre los analistas es la idea que la gente usa menos su propio automóvil. Encuentran más accesible, cómodo, ecológico y rentable usar las plataformas de transporte privado.
Conclusión
Gracias al modelo abierto de Uber, en el que cualquier persona puede conducir el tiempo que lo desee para otros, los consumidores optan por este tipo de transporte porque el servicio llega donde no llegan los taxis oficiales. Así, Uber ha logrado que más gente pague por moverse en coche por NY que lo que los taxis amarillos conseguían antes de su aparición.
Nueva York es ahora un mercado en el que el consumidor tiene más opciones y un mejor servicio. Mientras, en España, la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia) presiona en los juzgados para conseguir que el Gobierno no siga limitando la competencia. Creo que la renovación del sector es imparable. Tardará, pero llegará. Y espero que lo haga de forma justa para todos.
Gustavo Entrala es experto en Innovación de Marcas.
Asesora a CEOs y consejos de administración en su estrategia digital y hace workshops sobre tendencias e innovación in-company.
Está en Twitter y en LinkedIn y dirige un podcast sobre música y tendencias.